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Note

lunes, 13 de abril de 2020

CARTA DE LA ABUELA. CONFINAMIENTO 2020

REFLEXIONES DEL CONFINAMIENTO 2020
(VIVA ESPAÑA) (VIVA NUESTRA SANIDAD) (VIVA LA GENEROSIDAD DE TODOS LOS ESPAÑOLES)

Hoy 12 de Abril del 2020 padecemos la infección del coronavirus que ha recorrido casi todo el mundo.

Queridos hermanos todos:
Mis condolencias a los familiares de los fallecidos. Mi esperanza para todos los infectados y mi fuerza (que si físicamente es escasa, espiritualmente es profunda y extensa) para los sanitarios y todo el personal que trabaja sin descanso en la protección y reposición de nuestro bienestar.

No culpemos a nadie:

A lo largo de mi vida he oído hablar de grandes epidemias: la peste, la gripe (española), en la posguerra la tuberculosis, el paludismo (tratado con quinina), el carbunco que se trataba quemando la carne afectada,……recuerdo ir al dispensario con mi madre y hermanos a ponernos en la oreja, mediante un pinchazo, la dosis necesaria, después de soportar una cola interminable……, enfermedades de la piel por falta de higiene (sarna, piquiña) y muchos parásitos (piojos y pulgas)……. Al
volver mi hermano de la División Azul traía consigo una maleta de madera repleta de chinches……Mi madre, durante los tres años de la guerra civil se hizo una experta en ayuda sanitaria aun teniendo a su cargo siete hijos. Más tarde recuerdo acompañarla a cuidar a los enfermos y lisiados de ambos bandos, que daban de alta de los hospitales incluso con heridas abiertas sin tratar por falta de medios.

¡Pido a los cielos que cesen las guerras en el mundo! Solo traen destrucción.

España ha sido y lo sigue siendo, un país de grandes talentos…conozco algo de Ramón y Cajal…cuando estalló la Guerra Civil teníamos el mejor laboratorio en el campo de la Medicina de Europa, regentado por Gregorio Marañón, teniendo como colaboradores a Chucarro y Juan Negrín. En Psiquiatría López Ibor y los hermanos Nájeras. En Literatura, el más grande exponente Miguel de Cervantes Saavedra y su incalculable obra “Don Quijote de la Mancha”, Benito Pérez Galdós, Miguel de Unamuno, Miguel Hernández, Concepción Arenal, etc. El matemático, dramaturgo y político José Echegaray, primer español en ganar el premio nobel (1904). Grandes ingenieros, arquitectos, militares y demás.

A día de hoy los talentos siguen existiendo, pero desgraciadamente han de marchar lejos de España para desarrollar su potencial, visto que esta España no aporta para ellos las herramientas necesarias para su investigación y desarrollo.
Yo soy española, he nacido en España, pero siempre me he sentido Universal, las fronteras para mí no existen, seres humanos todos.
He conocido una España rica en agricultura y ganadería, bellos prados, hermosos arbustos, bosques inmensos, naturaleza salvaje por doquier. Era y siempre será un placer para mis sentidos tanta grandeza natural, mi nexo de unión con la Madre Tierra. Por las noches el firmamento se expresaba con todo esplendor dejándonos boquiabiertos.

Debemos hacer una reflexión:
Todos en mayor o menor medida somos culpables. La Naturaleza es maltratada ¿Quiénes vendieron, compraron y negociaron el pulmón del Mundo (Amazonia)? ¿Quiénes hicieron mover la tierra y rasgar los cielos para comprobar el efecto destructivo de la bomba atómica? ¿Quiénes queman nuestros montes y prados? ¿Cuántas veces en la mar y la playa hemos tirado botellas, bolsas, latas y demás basura?
La superproducción ha alentado a los agricultores a aumentar los fertilizantes, aun estando los cultivos en la proximidad del mar, a sabiendas que sus restos irían a parar al mismo.
El espacio está sucio (con tanto satélite) al mismo nivel que los océanos y la tierra en pleno apogeo de desertificación. El aumento de emisiones de gases de efecto invernadero ha
provocado el aumento de la temperatura del Planeta.
Todos estos datos son prevenciones de personas ejemplares de gran saber a tomar en cuenta (científicos, naturistas, etc.), cuestión que promotores y ejecutores han pasado por alto.
¿Quiénes cerraron sus oídos ante predicciones tan certeras?Personas con elevado índice intelectual (cuando ocupan cargos de responsabilidad) que han priorizado otras cuestiones de carácter más egocéntrico. Como vemos todo ha sido trabajo del hombre, con mayor o menor
responsabilidad. De ello podemos interpretar que nuestro comportamiento está lejos de ser lo bueno que debería haber sido.
Hemos recibido de Nuestra Madre Tierra lo mejor de ella: minerales, semillas, agua, plantas, animales, etc, y le estamos devolviendo su legado con contaminación, fuego, guerras y masacres. ¡Qué mal lo hemos hecho!
No hemos querido escuchar las advertencias del gran Félix Rodríguez de la Fuente y de su continuador Joaquín Araujo; los niños arrancan las flores de los jardines mientras sus
madres, tranquilamente sentadas en sus bancos hablan de modas y critiqueos, sin hacer nada por ello…….Los padres tampoco han querido leer y entender el decálogo que escribió Emilio Calatayud en su libro “Mis sentencias ejemplares” que en sus últimas páginas, establece un decálogo para no hacer de tu hijo un posible delincuente.
Siempre he creído y sigo creyendo, que cuanto más se sabe más responsable se es, y ante un delito, es de ley un mayor castigo; pero eso es lo que yo quisiera que fuese.

A lo largo de mi vida he tenido la oportunidad de dialogar o tramitar algunos asuntos, no importa el color de los funcionarios, pero he podido observar la falta de sensibilidad y
honradez de alguno de ellos. A mi escaso entender tenemos muchos políticos pero necesitamos más inspectores, y más cumplidores: tal vez me tocó lidiar con alguno de ellos.

Me parece vergonzoso que nuestros representantes se insulten en el propio Congreso. Ellos que deberían darnos ejemplo de ética y formación. No estamos en momentos de reproches. El Gobierno trabaja a pleno pulmón, dando una respuesta lo más acertada ante esta epidemia, que ha sobrepasado cualquier expectativa, y a buen seguro cometerá errores, como cualquiera los cometería en esta situación.
Me parece injusto que los Diputados tengan unos sueldos tan elevados y que muchos trabajadores y trabajadoras no puedan llegar a fin de mes con salarios ínfimos.
También quiero expresar, a quien corresponda, mi dolor ante las injusticias.
Me parece injusto que los miembros del Gobierno tengan unas pensiones vitalicias, aun ejerciendo después de su mandato en el ámbito laboral (son pocos los que renunciaron a esas pensiones vitalicias).
Considero injusto que bajo la palabra “aforados” sean exculpados de sus fraudes o errores.

Pido perdón por mi imprudencia, os hago saber que mi cultura es baja.

Soy María del Carmen Izquierdo Gallego, 84 años, ciega de nacimiento y actualmente también sorda, es decir sordo-ciega, madre, abuela y bisabuela.

Cartagena a 12 de Abril del 2020 (un mes de confinamiento)

DEFENSA DEL ÁRBOL. Nicanor Parra.

Por qué te entregas a esa piedra

Niño de ojos almendrados

Con el impuro pensamiento

De derramarla contra el árbol.

Quien no hace nunca daño a nadie

No se merece tan mal trato.

Ya sea sauce pensativo

Ya melancólico naranjo

Debe ser siempre por el hombre

Bien distinguido y respetado:

Niño perverso que lo hiera

Hiere a su padre y a su hermano.

Yo no comprendo, francamente,

Cómo es posible que un muchacho

Tenga este gesto tan indigno

Siendo tan rubio y delicado.

Seguramente que tu madre

No sabe el cuervo que ha criado,

Te cree un hombre verdadero,

Yo pienso todo lo contrario:

Creo que no hay en todo Chile

Niño tan malintencionado.

¡Por qué te entregas a esa piedra

Como a un puñal envenenado,

Tú que comprendes claramente

La gran persona que es el árbol!

El da la fruta deleitosa

Más que la leche, más que el nardo;

Leña de oro en el invierno,

Sombra de plata en el verano

Y, lo que es más que todo junto,

Crea los vientos y los pájaros.

Piénsalo bien y reconoce

Que no hay amigo como el árbol,

Adonde quiera que te vuelvas

Siempre lo encuentras a tu lado,

Vayas pisando tierra firme

O móvil mar alborotado,

Estés meciéndote en la cuna

O bien un día agonizando,

Más fiel que el vidrio del espejo

Y más sumiso que un esclavo.

Medita un poco lo que haces

Mira que Dios te está mirando,

Ruega al Señor que te perdone

De tan gravísimo pecado

Y nunca más la piedra ingrata

Salga silbando de tu mano.

martes, 7 de abril de 2020

ASUNTO NUESTRO

Hace tiempo que soy un gran perdedor. Me vanaglorio de ello porque cuando pierdo, pierdo de verdad. El sabor de la derrota es más intenso. No entiendo a los que ponen excusas.

El gobierno tiene todas las papeletas para perder, al parecer todo el mundo lo habría hecho mejor y antes; aunque suena temerario porque nadie ha estado en esta situación jamás. Es muy arriesgado hablar. Un ejemplo: Ayuso es la que solicitó la partida de material sanitario de cuyos aviones se sabe poco, y no el gobierno, pero el gobierno es el estafado y el que no se entera de nada. Por cierto, Inglaterra y una larga lista de países también han sido estafados. Esto pasa por delegar la producción de ciertos productos a grandes potencias como China, la principal productora de mascarillas, esterillas y satisfyer… ¿cómo iban a producir todo esto para el resto del mundo si la maquinaria china estaba confinada en casa? Deberíamos controlar parte de esa producción, se ha visto que no podemos depender tanto.

Se supone que el gobierno es en gran medida responsable de muchas muertes, ese no debe ser un peso ligero, tampoco soy capaz de empatizar. Empatizar es algo sobrenatural, tan sobrenatural que Word lo remarca como un error ortográfico, quizá no exista realmente el verbo. Lo que está claro es que España no ha sabido responder a tiempo teniendo a los vecinos espaguetis en aquél percal, sin contar con la “ingente” información de China y Corea del Sur… ¿Hablamos de Portugal? La vecina Portugal se ha anticipado bastante a nosotros, lo ha hecho muy bien. Algunas veces hay que hacer un ejercicio de conciencia de que están ahí, confinados al oeste, esos vende-toallas que hablan muy bien el inglés entre otras lenguas. ¿Necesitábamos las barbas de más vecinos? ¿Necesitábamos recordar que lo que le ocurre a otro no nos debe dar igual?
Lees un poco y entiendes por qué Asia ha controlado la expansión del virus: recortando las libertades de la ciudadanía, la cual “vive” en un Gran-Hermano. China dispone en sus calles de 200 millones de cámaras digitales de alta resolución que son capaces de reconocerte por los lunares de la cara, apps de geolocalización, etc. (Byun Chun-ElPais). Por cierto, ¿qué pasaría si nuestro gobierno impone un control similar? Espero que no suceda. Solo pensar en esa situación es deprimente, me dice un amigo.

España es grande, quizá no. A las 20:00 se aplaude y se escucha el Dúo Dinámico en los balcones pero no es porque España sea grande; se aplaude a unos determinados trabajadores como los sanitarios, cajeros de supermercados, etc. que están dando el callo mientras el resto está en casa. Ellos salvan vidas, nada nuevo, pero resulta que ahora lo hacen bajo insuficientes medidas de protección frente al virus y por lo tanto exponen sus vidas y las de sus familiares al volver a casa. Se escucha eso de héroes de bata blanca. Ojalá la valentía no saliese tan cara, como canta Sabina en su: Noches de Boda…. La valentía les ha salido cara a algunos profesionales. Hasta que no muere un familiar no entiendes por qué no puedes ir a La Manga en Semana Santa; hasta que no llevas 8 días intubado al borde de la muerte y acabas saliendo del hospital, no valoras a los médicos y resto del equipo que has infectado más que probablemente. Y aún así la memoria se borra rápido. ¿La empatía es algo sobrenatural? No es algo natural desde luego, pero se puede ejercitar. ¿Recordaremos que la sanidad se ha de cuidar, que es un bien en el que hay que invertir, recordará el sanitario que ha de luchar por sus condiciones laborales si el estado no lo hace por ellos, recordarán que aplaudían los que les aplaudían cuando llegue el momento? ¿Recordaremos a nuestros ancianos que se han quebrado como hojas secas en las residencias, esas personas por las que estamos aquí? En ocasiones por los que seguimos aquí, los que nos rescataron cuando no había un duro: las pensiones de nuestros mayores nos rescataron a muchos. Si los reyes magos son los padres, los bancos son los abuelos. ¿Recordaremos que hay un sector de trabajadores que de repente son esenciales, como las bolivianas que cuidan de nuestros abuelos, que muchas tienen contratos basura?, no olvidemos que a la vez que son esenciales son apestadas.

¿España es grande? ¿Pero qué es España? Dicen que los políticos son fiel reflejo de la sociedad.
Todo el mundo sospechaba que los políticos mienten, que interpretan un papel o que nos leen en alto, escritos de otros; que a veces tienen que tomar omeprazol antes de abrir la boca pero, ¿todas esas mentiras son necesarias en este momento tan delicado? Han pasado de decir verdades a medias a mentiras netas. Hasta que el virus no ha reventado, nada iba mal, hasta que no han reventado los hospitales, el virus estaba controlado por los sanitarios. Aunque tengo claro que hay mucha gente que no está preparada para escuchar ciertas crudezas, como son ciertas realidades. ¿Y la oposición, está valiendo para algo? Vale, pero tiene que poner la voluntad, presionar con ideas valiosas, si no lo hace es cómplice en negligencias del gobierno y ha de cumplir la misma condena. Porque todos tienen responsabilidad. Como dice Iñaki Gabilondo, la política no nos deja ser una masa unida por algo, aunque sea por la debacle. Los españoles estamos rotos, somos una familia rota de siempre: nos chantajeamos, nos vomitamos continuos reproches en vez de estar unidos en la adversidad, y eso es por la política y por lo políticos, porque cuando se faltan el respeto, de forma directa aunque “inconsciente”, hacen que nos faltemos el respeto; cuando dicen estupideces, nos hacen sentir estúpidos y así etcéteramente. Es patético ese cainismo que caracteriza al español, ése deleznable y hediondo revanchismo de los que no saben perder. Todo esto es patético. ¿España es grande? Desde luego la política no, creo que ha llegado el momento de exigir otra política. Exigir. De alguna manera. Política de altura.

Hablemos de prevención, de advertencias. Iker Jiménez advirtió, antes de que lo hiciese el gobierno ni la oposición, que el COVID no era asunto baladí. Lo llamaron y re-entrevistaron en un programa de radio. Antes de que Iker hablase, una tercera persona del programa y en directo se refirió a él como “el de los muertos” (ése es el nivel). Luego habló Iker y el entrevistador. Al tercero no se le escuchó más, supongo que por vergüenza torera al descubrir su nivel de cuñadismo y la solidez de “el de los muertos”; no obstante, ¿quién no es, aunque sea por deporte, un cuñado alguna vez?
Qué íbamos a prevenir si el poder económico no quiere la prevención: prevenir no hace dinero, no contribuye al valor de los accionistas, se necesita el riesgo, si previenes no vendes fármacos, pero si previenes evitas la destrucción del Amazonas, la destrucción de nuestro Mar Menor. ¿Qué va a prevenir Bolivia, Ecuador, o los refugiados de Lesvos? Como mucho cavar tumbas. Existen otras realidades. Hay lugares en los que la realidad es más cruda, lugares donde El Hambre mata mucho más que el coronavirus, pero esta vez nos ha tocado a Europa, al hombre blanco. ¿Recordaremos todo esto aunque sea a través de la muerte de los nuestros, recuerda alguien lo bien que se está sin dolor de estómago? ¿Recordaremos el cielo limpio de estos días, los cervatillos bañándose en la playa, recordaremos el Himalaya limpio de cadáveres y el agua cristalina de la Barceloneta?

En EEUU hablan de Pearl-Harbour, se refieren al problema en una jerga bélica que huele a alcanfor. El poder quiere convencernos de que existe un enemigo, pero lo único que ha hecho el coronavirus, más allá del dolor inevitable, es un tac-computerizado de nuestra sociedad enferma. Mucha capacidad para consumir Amazon, pero pilares tan importantes como la educación, la sanidad, la justicia e investigación, se encuentran escuálidos y tambaleantes. ¿Es lo que queremos? Es demasiado el opio que estamos tomando para no darnos cuenta.
Dicen que cambiarán muchas cosas después de la crisis. Cuando salgamos a la calle y nos miremos, ¿recordaremos algo?

“Sin progreso moral, no hay verdadero progreso” Markus Gabriel.

THA